jueves, 18 de diciembre de 2014

ALGUNAS OBJECIONES DE LOS "TESTIGOS DE JEHOVÁ"

ALGUNAS OBJECIONES DE LOS "TESTIGOS DE JEHOVÁ"

Con la solución católica

Padre Manuel Robledo G.

PRÓLOGO

Hace algunos años vino de Estados Unidos un grupo de extranjeros, propagandistas de una nueva religión.
Tímidamente fueron seguidos por algunos mexicanos que, al ignorar las inmensas riquezas de su Catolicismo, fueron enseñados a recorrer las calles y a sembrar el terror con sus amenazas de un inminente fin del mundo, que dejó a las almas en confusión y angustia.
Hoy predican la necesidad de convertirse a Dios: un Dios que ellos conciben a estilo de una  teología veterotestamentaria y le llaman, con flagrante error filológico, "Jehová", cuya unidad esencial defienden.
Por lo mismo, niegan el Misterio de la Santísima Trinidad revelado por Nuestro Señor Jesucristo, la Divinidad del mismo Cristo y del Espíritu Santo. Amén de profesar todas las negaciones  características del  Protestantismo.
De aquí se sigue una interminable serie de ataques a todos los Dogmas de la Fe Católica.
Para probar sus errores, se apoyan en una traducción espuria de la Biblia, de la cual deducen negras amenazas escatológicas, dejando en duda el "más allá" y negando abiertamente la inmortalidad del alma.
La organización depende de un grupo incógnito escondido en el anonimato, el cual, desde Nueva York, dicta órdenes y determina las creencias de la Secta mediante escritos de apariencia  exegética, que todos los miembros deben estudiar, asimilar y propagar.
Los adeptos son clasificados, herméticamente controlados y económicamente explotados; han sido inyectados de desprecio al prójimo y a las Instituciones Civiles y Religiosas sin distinción.
Provistos, pues, de una autosuficiencia insultante, pretenden inducir a la gente sencilla a renegar de su Bautismo, a blasfemar de Jesucristo y del Espíritu Santo, a hundirse en un materialismo disfrazado de Religión.



I Y así, vemos actualmente, entre los "Testigos de Jehová" gente de ambos sexos y de toda edad: hombres y mujeres maduros que viven incrustados en las Instituciones Civiles, son amparados por ellas y viven de ellas, al tiempo que las odian y maquinan su destrucción; ancianos que ya deberían prepararse a bien morir, pero que han renegado de su Bautismo, y hasta tiernos niños que han sido criminalmente inducidos a responder: “No queremos entrar en su Cielo, porque no existe”. Debido a que están obligados a estudiar impresos de apariencia científica pero de fondo corrosivamente crítico, los "Testigos de Jehová" se creen sabios exégetas y eminentes teólogos. Han aprendido de memoria algunos textos dolosamente dispuestos para rebatir los puntos básicos del Catolicismo, y tratan de lucirse en público vomitando blasfemias.

Y al mismo tiempo se inflan con la falsa denominación de "Testigos", niegan la Esencia Divina al negar la Trinidad. Han sido engañados por la antigua Serpiente que sedujo a Eva y por ella a Adán, con la promesa de que serían “como Dios, conocedores del bien y del mal". (Gén. III-5).

Un Testigo de Jehová milita en la amargura y la agresividad. Sólo abre la boca para enseñar, nunca para preguntar; jamás asume la actitud o disposición de aprender del Único Magisterio Infalible instituido por Nuestro Señor Jesucristo: la Santa Iglesia Católica, Madre y Maestra de todos los  pueblos, Columna y Fundamento de la Verdad. (Cf. Mth. XXVIII-19).

En este libro presentamos ciertas objeciones que, durante nuestras Misiones, nos opusieron algunos Testigos de Jehová.

Fueron éstas de viva voz o por escrito, procuramos reproducirlas en substancia o transcribirlas textualmente, dejando en el anonimato la identidad de los objetantes, a cuyas dudas dimos amplia solución.

Quedan yuxtapuestas y numeradas, y enseguida la solución católica. Así se entreteje un verdadero diálogo de alcances ecuménicos.

De este método no espere nadie una literatura amena. En cambio: nos reserva para la Fe, un arsenal de verdades aprovechables en su oportunidad.
De los benignos Lectores, queda afectísimo en Cristo, el Autor.





                                                                                                    P. Manuel Robledo Gutiérrez, E.D.

domingo, 7 de diciembre de 2014

Invitación.

Saludos hermanos.
Los invitamos a la celebración de la misa para pedir por el descanso del P. José García Espejel el día martes 9 de diciembre de 2014 a las 12:00 hrs. en el templo de San Cosme y San Damián en la calle Serapio Rendón No. 5, Col. San Rafael, Ciudad de México, D.F.